34 Principales en Petronor

Llegados a estas fechas, otro año más en la refinería 74 personas han superado el límite de horas extraordinarias permitido por la ley. La verdad es que no nos sorprende, lo venimos denunciando día a día ante la empresa, la inspección o quien nos quiera escuchar; aquí se programan muchos de los trabajos en función de horas extras. Pero de ahí a llegar a las 38.071 horas hay mucha diferencia, sabiendo que en 2010 fueron 20.329. Ahora bien, hay que tener en cuenta que, gracias al informe de la inspección que exige a la empresa incluir las horas a descansar, sabemos que este año han sido 4.960 voluntarias y 9.250 obligadas. Al fin y al cabo nos da lo mismo porque todas son prolongaciones de jornada.

Entre los datos que nos ofrece la empresa hay algunos que queremos resaltar por su magnitud o por las implicaciones que pueden tener. Por ejemplo, hay una persona que ha trabajado 810 horas extras, esto es la mitad de nuestra jornada anual, o 34 que han pasado de las 200, cuando el límite legal son 80 al año, todo esto nos parece inaceptable. Ahora, sabemos que más allá de la relativa “voluntariedad” de estas horas, hay motivos que permiten que esto funcione y que esas 74 personas hayan superado el límite legal.

Si ordenamos por departamentos a las personas que forman parte de las 34 principales, podemos ver que 26 son de Mantenimiento y 8 de Procesos, luego está el limbo con 40 personas entre las 80 y las 200 horas extras. Lo primero que nos queda claro es que se debe de adecuar la presencia a las necesidades y valorar si es necesario plantear el trabajo a turnos. Si con esto no fuera suficiente está claro que se necesita más plantilla, solo hay que ver los datos: en el Taller de Oficios Varios entre 4 personas tienen 1.717 horas, en Programación 4 hacen 976, el Taller Eléctrico entre 6 1.734, en Calderería 6 personas suman 1.780, en Instrumentación también entre 6 hacen 1.547, entre en URF y SR6 son 8 personas las que acumulan 3.255 h.

Creemos que son los responsables de cada departamento los que ponen las condiciones para que esto funcione así. Luego están los jefes de talleres, y de las distintas áreas de procesos, que tienen en su mano el negarse a firmar horas extras, o al menos aquellas que no sean obligadas, como las de falta de relevo, emergencias y situaciones imprevistas.

En TU pensamos que hay sobrados motivos para no meter horas, el primero es la salud, porque no estamos de acuerdo con el refrán que dice que el trabajo es salud. Por otra parte en las prolongaciones de jornada hay más posibilidades de sufrir o provocar accidentes. Otra razón fundamental es que con el índice de paro que soportamos no es de recibo prolongar jornadas, en todo caso pensamos que una solución para este problema es el reparto del trabajo, y con esto no nos referimos a la precarización.

Luego está la relación que vivimos con la empresa últimamente, con cinco periodos de huelga y la mesa que continúa sin abrirse, la amenaza de ERE, etc. Creemos que la situación no es para estar muy voluntarista precisamente, pues la empresa sólo pretende rebajar los gastos de plantilla por medio de las horas extraordinarias, apelando a “remar en la misma dirección”, mientras olvida nuestras pretensiones; trabajar con más seguridad, conseguir un buen convenio, etc.